La biblia no es el libro más popular del mundo por nada, y es que tiene su base, ya que se trata de es una colección de libros sagrados que constituyen la religión cristiana y católica, por lo que es altamente importante.
Se divide en dos partes, que son El Antiguo Testamento, en donde se narra lo que sucedió antes de que naciera Jesús, que era el hijo de Dios, y El Nuevo Testamento, que se escribió después de que Jesús naciera en la Tierra.
Si bien la biblia contiene múltiples historias sobre Jesús de Nazaret y sus seguidores, llamados cristianos, igualmente se hallan relatos de todo tipo, entre ellos, tragedias terribles que pocos conocen, pero que valen la pena sacar a relucir.
Diluvio para empezar de nuevo
En el libro Génesis, se cuenta una de las peores tragedias que se narran en la biblia, y de las más conocidas por las personas, es el diluvio que envió Dios a la tierra, con la intención de empezar con la humanidad de nuevo, salvándose solo aquellas personas que creyeran en las advertencias de dicho diluvio.
Por supuesto que esto implicó la muerte de toda la humanidad, excepto de Noé, su familia y los animales que iban en la barca que él construyó.
Esta acción no erradicaría el mal ni los pecados de la humanidad, ni evitaría que la descendencia de Noé los cometiera, por ello, según la biblia Dios dijo "ni volveré más a destruir todo ser viviente, como he hecho".
La violación de Dinah y su casamiento
La violación de Dina es otro hecho terrible que nos cuenta la biblia, en el libro Génesis, donde se dice que el patriarca Jacob tuvo 12 hijos, y entre tantos, solo uno de ellos era una mujer, Dina, en quien para su mala suerte, el príncipe Siquem se fijó.
Siquem quiso tenerla una vez la vio, y las palabras exactas que se usan en la biblia para describir, fueron "la agarró y se acostó con ella por la fuerza".
Lo peor de la situación, es que como esta violación trajo deshonra a la familia de Jacob, esta familia y la de Siquem decidieron casarlos, siempre que este último se hiciera la circuncisión, y a pesar de haberlo hecho, al final, los hermanos de Dina no estuvieron satisfechos, y atacaron el pueblo de príncipe mientras aun él estaba adolorido.
La masacre del desierto
En el libro de Éxodo se cuenta el escape de los israelitas de Egipto, quienes no tuvieron un mejor destino prontamente, y es que vagaron por el desierto durante 40 largos años sin encontrar tranquilidad, más bien se llenaron de frustración.
El nivel de frustración del pueblo era tal que tomaron la decisión de construir un ídolo de oro ante la ausencia de pruebas de que Dios los ayudara.
Esta acción condenó el destino de muchos, porque Moisés ordenó una emboscada contra ellos indicando que "cada uno de ustedes mata a su hermano, a su amigo y a su vecino".
Destrucción de Sodoma y Gomorra
Sodoma y Gomorra eran dos ciudades señaladas en Génesis como aquella en donde habitaban los más grandes pecadores, lo que llegó a oídos de Dios, y por ello este se planteó en acabar con las mismas, indicándole a Abraham.
No obstante, Abraham dijo que no debía destruir la totalidad de Sodoma y Gomorra porque seguramente había buenas personas, al menos unas pocas, y para comprobarlo, Dios mandó a dos emisarios que fueron testigos de los pecados que se cometían allí, pues nada más llegar a la casa de Lot, fueron violados por la gente de las ciudades.
A raíz de esto, Dios destruyó la ciudad al día siguiente, mandando una lluvia de azufre que se convirtió el fuego, acabando con Sodoma y Gomorra, no sin antes advertirles a Lot y su familia para que salieran de allí.
Concubina violada y desmembrada
Se cuenta en el libro de Jueces que Levita viajó con su concubina hasta Guibeá para pasar la noche en una casa del lugar, y al enterarse la gente del pueblo, se acercaron a la misma no precisamente con buenas intenciones.
Lo que hizo el cabeza de familia de la casa para protegerse a todos, fue ofrecer a su hija y la concubina de Levita, y lo siguiente que ocurrió fue terrible porque dice el texto con respecto a la concubina que "la violaron y abusaron de ella durante toda la noche, y al amanecer la dejaron ir".
Lo peor para ella no había terminado, porque luego Levita la llevó a su hogar, para solamente cortarla en pedazos, desmembrándola en un total de 12 trozos de su cuerpo para mandarla a cada persona de la tribu de Israel.
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